Alejandro López Moriena: “Hoy se podrían aprovechar mejor las tierras sin estropear ecosistemas importantes”

Así lo afirmó Alejandro López Moriena, responsable técnico del proyecto de ADECOAGRO, en el diálogo que mantuvo con Ecopuerto.com. Para López Moriena en el debate energía versus alimentos, no se considera que hoy la tierra esta subutilizada y que la producción podría ser superior a la actual. El experto explicó que con el avance tecnológico, se podrá incrementar el rendimiento de cada hectárea cultivable más rápido de lo que pensamos. El proyecto integrado de biocombustibles en el que está trabajando la empresa, el desarrollo de prácticas agrícolas amigables con el ambiente y las tendencias futuras en los precios de los commodities; fueron otros temas analizados durante la charla.

¿Cuáles son las principales acciones que está desarrollando ADECOAGRO en el tema de biocombutibles?

En este tema nosotros estamos focalizando en la Argentina la producción de etanol a base de maíz dentro de un modelo integrado, que incluye la elaboración de este carburante a partir de ese cereal, el empleo de los subproductos para alimentar vacas de tambo y la producción de leche en polvo y de quesos de manera industrial.

¿Qué inversión promedio requiere la implementación de este proyecto y en qué sitio geográfico se va a localizar?

Todavía estamos realizando los estudios, pero lo que sí se empezó a construir es el primer módulo de tambo, que es para 3.000 vacas en ordeñe, y estará ubicado a 80 Km. al sur de Venado Tuerto, en la localidad de Cristophersen (provincia de Santa Fe). Elegimos ese lugar porque allí ya estamos operando con el negocio de tambo. Lo importante es desarrollar el proyecto y después veremos donde se radicará finalmente. La inversión que requiere será cercana a los 300 millones de dólares.

Una de las cuestiones que abordó en su presentación fue el de llevar adelante la actividad agrícola de manera amigable con el ambiente. ¿Podría ampliar este tema?

Para lo más tradicional que es la Pampa Húmeda o la zona de cultivos tradicionales típicos, lo que nosotros proponemos es la implementación de la Siembra Directa, que implica básicamente no laborear el suelo y tener en cuenta aspectos vinculados con la rotación de cultivos, el manejo de la fertilización, etc.

Al no laborear el suelo se evita su degradación y a través de la acumulación de rastrojos se mejora su estructura. Eso es lo básico. Después se pueden implementar otras medidas como el manejo de pesticidas, el manejo integrado de plagas y el reciclado de bidones de agro tóxicos; entre otras. Hay un montón de pequeñas acciones que el productor puede ejecutar, que se transforman en buenas prácticas y que tornan sustentable cualquier proyecto a gran escala.

Finalmente, ¿qué nos puede decir respecto del debate energía versus alimentos?

Con respecto al tema de la demanda, vale aclarar que en el mundo hay tierra suficiente para producir mucho más de lo que estamos haciendo: alimentos, biocombustibles, lo que queramos. La tierra hoy está subutilizada y se podría aprovechar mejor sin tener que estropear ecosistemas importantes.

En segundo lugar, en el caso de los biocombustibles, la complementariedad está basada en considerar el uso de los residuos y de los subproductos. Normalmente se piensa que hay que optar por una cosa u otra y en realidad se deben contemplar ambas. Y la tecnología va a hacer que cada hectárea de cultivo rinda cada vez más y más rápido de lo que pensamos.

En cuanto al tema de precios, los commodities van a subir, ya que la economía viene creciendo a un ritmo de un 5% anual en los últimos seis años. Lo que hay que mejorar es el poder adquisitivo para que la población pueda acceder a ellos. Y con respecto al impacto que esto tiene en la sociedad, cabe aclarar que la mitad de la fuerza laboral del mundo depende del campo, por lo que los precios altos de los commodities los benefician.

Por Debora Grinstein