Biotecnología agropecuaria
Versión taquigráfica de la Comisión de Ciencia y Tecnología, sobre reunión del Proyecto de Ley de Biotecnología Agropecuaria del 1º de noviembre de 2001, a la que concurrieron autoridades gubernamentales.
Remitido por:
Lic. Silvina L. Gutiérrez, Bióloga
Asesora Diputado Nacional Jorge Giles
E-mail:
En Buenos Aires, al primer día del mes de noviembre de 2001, a la hora 10 y 34:
Sr. PRESIDENTE (Peyrou).- En nombre de la Comisión de Ciencia y Tecnología agradezco la presencia de todos nuestros invitados. Se encuentran aquí la diputada Mabel Müller, presidenta de la Comisión de Recursos Naturales y Conservación del Ambiente Humano, el diputado Alberto Briozzo, presidente de la Comisión Especial de Biotecnología, y el diputado Humberto Volando, vicepresidente de la Comisión de Agricultura y Ganadería. Asimismo, contamos con la presencia de un grupo de personas en representación de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación, coordinado por el señor secretario, ingeniero Marcelo Regúnaga. Por la Secretaría de Desarrollo Sustentable y Política Ambiental se encuentran presentes el ingeniero Carlos Merenson, director nacional de Desarrollo Sustentable, y Martín Funes, jefe del gabinete de asesores. Por la Secretaría de Tecnología y Ciencia está la señora coordinadora del Comité de Ética, Otilia Vainstok y el presidente del CONICET, Andrés Carrasco. En representación de la Cancillería hay aquí un grupo importante de funcionarios coordinado por la embajadora Bondanza: se encuentran presentes el ministro Ablín, el ministro Martínez Gondra y otros funcionarios.
El tema que nos ocupa es el proyecto de ley de biotecnología agropecuaria -Orden del Día N· 2819. Este proyecto, que está en condiciones de ser tratado en la Cámara, ha generado, como todos saben, una discusión importante dentro y fuera de esta institución.
Nuestra idea es que el conjunto de los legisladores de todas las comisiones que tienen que ver con esta temática, más allá de aquéllas a las que haya sido girado, escuchen la palabra de los funcionarios públicos y expertos sobre el tema en alguna reunión que vamos a hacer la semana próxima.
Sra. MÜLLER.- Como presidenta de la Comisión de Recursos Naturales y Conservación del Ambiente Humano, quiero agradecer la presencia de todos ustedes. En un tema tan importante y controvertido como éste necesitamos escuchar su opinión. Hay mucha gente a favor y mucha en contra. Nosotros, desde la comisión que presido, en este proyecto de ley y en todos los proyectos de ley, cuidamos que se preserve el ambiente con algún artículo especial. No lo hemos encontrado en este proyecto. Estamos dispuestos a escuchar y recién luego opinaremos.
Sr. PRESIDENTE (Peyrou).- Reitero el comentario formulado por la señora diputada Müller en cuanto a la necesidad de escuchar sus opiniones. Queremos saber si según su entender el proyecto tiene carencias o aspectos que no conforman. Este es el momento de manifestarlo.
Creo que sería importante comenzar esta reunión con la exposición del señor secretario de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación, ingeniero Marcelo Regúnaga.
Sr. REGÚNAGA.- Para la Secretaría, y entiendo que para la Argentina toda, la biotecnología ha sido unode los componentes en ciencia y tecnología que mayores aportes ha hecho durante la última década a nuestro país, y seguramente tendrá mayor incidencia en el futuro.
Argentina, como ustedes bien saben, enfrenta enormes problemas en el comercio internacional debido a la competencia subsidiada de terceros países. Nuestros productores se ven enfrentados a la necesidad de competir y mejorar su competitividad en forma sistemática. La biotecnología ha permitido en la última década aumentar sustancialmente los rendimientos, bajar significativamente los costos de producción y además tener un impacto sensiblemente favorable para el manejo adecuado de los recursos naturales. En este sentido quiero destacar que quienes hemos analizado los temas vinculados a la erosión de los suelos y a un manejo racional de los recursos en la región pampeana, escuchamos durante varias décadas en el 70 y el 80- hablar sobre el deterioro que se producía como consecuencia de la utilización de actividades y prácticas que implicaban una erosión y un manejo irregular de los suelos.
La combinación de una tecnología de siembra directa con determinados productos derivados de la investigación biotecnológica ha permitido incorporar planteos de manejo que hoy en día admiten continuar en la producción agrícola en forma muy intensiva, esencialmente debido a la unión de productos que se pueden manejar con determinados agroquímicos y a la maquinaria que permite la la branza mínima.
Para la agricultura argentina poder disponer de un paquete tecnológico, que implica la utilización de tecnologías de mínima labranza y de productos derivados de la biotecnología, ha permitido alejar la inquietud de la erosión y la pérdidade la capacidad productiva de nuestros suelos. Adicionalmente, estas técnicas de manejo han posibilitado limitar la cantidad de agroquímicos, particularmente herbicidas e insecticidas, que son necesarios por la especificidad que tienen los organismos genéticamente modificados.
De manera que hoy, cuando analizamos el impacto que tiene sobre los suelos y sobre los costos de producción, encontramos que tenemos beneficios desde el punto de vista del manejo. En primer lugar, beneficio porque estamos utilizando menos agroquímicos por hectárea, herbicidas e insecticidas y, en segundo término, fundamentalmente, porque ello implica reducir los costos de producción para un país que, como decía, tiene el problema de competir con subsidios de terceros países.
Otro elemento que quiero señalar es que siempre ha habido dudas con respecto a la incidencia que pueden tener los productos genéticamente modificados sobre el medio ambiente o la salud humana. La vivencia científica en todo el mundo hasta el día de hoy es clara, no tienen impactos negativos.
Hace una década, desde la Secretaría de Agricultura, creamos la Conabia -Comisión Nacional Asesora en Biotecnología- y el marco normativo a nivel de resoluciones, no según lo que pretendemos tener hoy que es una legislación específica para el sector agrícola. A partir de ese momento hemos organizado dentro de la Secretaría de Agricultura el seguimiento de los antecedentes internacionales y, como es obvio, existe un control estricto a partir de la Conabia sobre la información local y lo que sucede a nivel internacional.
He mencionado a la Unión Europea porque es uno de losque tiene la posición más crítica y donde existen mayores restricciones respecto a otros países.
Recientemente el comisionado científico en Bruselas señaló en una de sus comunicaciones que de acuerdo a los antecedentes que tenían, los organismos genéticamente modificados no tienen impacto sobre la salud y además como permiten reducir el uso de agroquímicos en definitiva tienen un impacto positivo sobre el manejo de los suelos.
Lo que entendemos es que, si bien desde el punto de vista del futuro de la agricultura argentina y mundial los organismos genéticamente modificados son una oportunidad muy importante y posiblemente sean el avance más revolucionario que se dio en la última década y que se vaya a dar en el futuro, es necesario seguir muy de cerca la evolución, las experimentaciones y la liberación al medio de estos productos.
Por eso, mientras no hubo una norma, la secretaría definía un marco y la Argentina era uno de los países que realizaba los controles más estrictos a nivel internacional en este sentido, desde la regulación que hoy se dispone en la Secretaría de Agricultura y leyes conexas vinculadas a la legislación de semillas y a la de sanidad animal.
Tenemos un vacío, necesitamos una legislación que nos dé más instrumentos a las autoridades deaplicación, la Secretaría de Agricultura, para sancionar, para dar seguimiento a todos los aspectos que hacen hoy y harán en el futuro en materia de biotecnología.
Por eso, para la Secretaría de Agricultura, contar con un marco normativo específico en la materia va a ser un instrumento de gran vitalidad y desde nuestro punto de vista es un aspecto muy importante de llenar lo antes posible.
Nosotros en alguna ocasión y de hecho hemos tenido algunoscasos conocidos el año pasado, hemos encontrado irregularidadesen el proceso de liberación al medio o de experimentacióny hemos tenido que utilizar la legislación de semillaso la legislación de sanidad animal porque para sancionar, la Secretaría de Agricultura todavía no cuenta conuna legislación específica.
De manera que para nosotros disponer de este marco normativoes muy importante porque de esta manera vamos a usar la legislación específica y no legislaciones alternativas para sancionar o limitar la utilización cuando no corresponda, sobre todo en los procesos de liberación al medio, teniendo en cuenta que alguna vez ha habido escapes y es necesario tener un control muy directo sobre estos temas.
Quiero aclarar que desde la Secretaría de Agricultura hemos planteado la necesidad de disponer de este instrumento que esencialmente es para la autoridad de aplicación y queno pretende abarcar todos los aspectos relativos a la biotecnología en la Argentina, los cuales tienen componentes de salud y de otras áreas que no son las específicas.
Nos pareció que constituye una cuestión de alta prioridad disponer de un régimen de bioseguridad para la biotecnología agropecuaria. Desde luego, comparto la propuesta de los legisladores en el sentido de que contemos con esta legislación específica para el sector agropecuario porque de esa manera la secretaría, que es la autoridad de aplicación, podrá disponer de instrumentos mucho más poderosos.
Con respecto a cómo vemos el futuro, debo decir quehasta ahora el principal impacto de los organismos genéticamente modificados ha estado orientado a las técnicas agrícolas, es decir que tienen un impacto sobre la producción agropecuaria. Existen en este momento en niveles de experimentación loque se denominan productos genéticamente modificados desegunda generación. Estos productos, que seguramente estarán disponibles en dos o tres años más, no apuntan solamente a permitir una reducción de costos de producción,un aumento de rendimientos y un mejor manejo de los suelos, sinoque apuntan a mejorar los contenidos intrínsecos de losalimentos. Esto significa que dentro de poco tendremos por ejemplo tomates con contenidos más altos de vitaminas y soja con contenidos de aceites que van a reducir el colesterol. Es decir que la segunda generación de productos biotecnológicos tiene que ver con la mejora de la capacidad intrínseca que van a tener los alimentos desde el punto de vista nutritivo y de la salud.
Por lo tanto, así como en la década del 90 y todavía en la actualidad los productos de la biotecnología son muy importantes para mejorar las condiciones de producción de la agricultura, también es relevante tener un contexto que promueva y dé previsibilidad para que las empresas inviertan a fin de avanzar en esta segunda etapa o segundo tipo de productos. De hecho, complementariamente a esta ley, mi intenciónes fortalecer con un crédito internacional las actividades que desarrolla el INTA en la materia, y recientemente hemos acordado para algunos productos que no se investigan a nivel internacional -como es el caso del girasol- integrar las actividades que desarrolla el INTA con las de empresas del sector privado, de manera de avanzar en la investigación biotecnológica de bienes que por el tamaño del mercado no se investigan en terceros países y que luego nosotros adaptamos a las condiciones de la Argentina. De este modo, complementariamente a esta ley aunque también va a ayudar esta ley, al crear un marco normativo mucho más claro y previsible- esto va a colaborar para que empresas argentinas decidan incorporarse a la investigación, así como las instituciones públicas podrán contar con los beneficios de las investigaciones que se realicen en la materia.
La Secretaría estuvo revisando los alcances de la legislación, tal cual está el texto que se incluyó en el Orden del Día. Estamos en principio de acuerdo con el texto y dispuestos a analizar detalles que pudieran incorporarse, y mejorarse. Estamos abiertos a responder cualquier inquietud que puedan tener.
Sr. PRESIDENTE (Peyrou).– Tiene la palabra la señora Bondanza.
Sra. BONDANZA.- Soy la directora general de Medio Ambiente de la Cancillería. Nuestra área se encarga de la negociación de todos los acuerdos e instrumentos internacionales relacionados con el medio ambiente, así como del seguimiento y las relaciones con los otros países sobre esos temas. Nos ha correspondido negociar el protocolo de Cartagena sobre bioseguridad. Ustedes saben que como un desprendimiento de la convención de diversidad biológica, y por un clamor mundial, se negoció un protocolo que rige el transporte internacional de los organismos genéticamente modificados, pero no se incluye a los farmacéuticas.
Ese protocolo fue suscrito por Argentina en mayo del año 2000 y entrará en vigor no podemos predecir cuándo porque hacen falta cincuenta ratificaciones y el número todavía es muy escaso; son sólo seis-, por cuantonos debemos ir preparando para su entrada en vigor. Mientras tanto Cancillería está participando en las reuniones internacionales que se realizan para preparar la entrada en vigor de ese protocolo. Lo hacemos en estricto contacto con la Secretaría de Agricultura, la Secretaría de Medio Ambiente y todas las reparticiones relacionadas con ese tema.
El secretario Regúnaga se ha referido con mucha propiedad a todas las ventajas presentes y futuras que tiene la biotecnología,s obre todo para nuestro país. Compartimos plenamente esa visión. Se trata justamente de aprovechar todas las ventajas que la biotecnología tiene para el desarrollo agrícola, la conservación de los suelos y seguridad alimentaria; todo esto en el necesario marco de seguridad para evitar cualquier consecuencia no deseada. En este sentido nosotros tenemos que demostrar al mundo, como lo estamos haciendo, la seriedad con la que trabajamos.
Este tema de bioseguridad es controvertido, todos lo sabemos. Hay personas que están legítimamente preocupadas por algún eventual efecto adverso, y hay que darles alguna satisfacción. Hay también otros sectores de interés que pretenden esconder intereses de proteccionismo y distorsiones al comercio, utilizando como pretexto los temas de medio ambiente. Entonces la posición de nuestro país en los foros internacionales, consensuada con las demás reparticiones, ha sido defender el desarrollo de la biotecnología, los legítimos intereses de los productores argentinos y asegurar al mundo que tenemos condiciones y que estamos trabajando conla debida seriedad como para que se pueda confiar en los eventos que aprueba Argentina y en la manera en que trabajamos. Esta sería una introducción conceptual, que es la que nosotros utilizamos en todos los foros internacionales.
Con respecto a este proyecto quiero felicitar a quienes han tenido el impulso y el esfuerzo para encaminarlo. Se trata deun proyecto muy útil y necesario. Necesitábamos tener una estructura institucional, que de hecho ya funcionaba y muy bien. La CONABIA es una institución reconocida, regionaly mundialmente, como muy eficiente. Pero había que incorporar fuerza y estructura legal, como corresponde.
Al mismo tiempo, el Protocolo nos exigía una serie de organismos, definiciones y facultades bien claros y si bien operaba, repito, necesitaba de una estructura legal. Esto es lo que este proyecto atiende muy bien, es decir, a que las organizaciones y los distintos estamentos tengan la fuerza legal que corresponde.
Entonces, estamos muy complacidos al ver este proyecto y apartir de esa declaración, desde el punto de vista de la Cancillería, quisiera hacer algunas observaciones preliminares, que son simplemente inquietudes para que ustedes las contemplen y si es posible y conveniente incluyan en el texto. Se trata de observaciones que no hacen al fondo de la cuestión porque el proyecto, repito, está muy bien.
La primera reflexión que deseo realizar se refiere aque es muy conveniente que este proyecto desde su inicio esté coordinado con el Protocolo de Bioseguridad. Este protocolo va a ingresar en cualquier momento, si es que no lo hizo, para ser considerado y aprobado por el Poder Legislativo. Entonces, creo que es bueno que de entrada tratemos de coordinar en la mayor medida posible. En primer lugar, se exigía una organización, que la vamos a tener y que es sumamente importante.
Más adelante, en el tema de las definiciones, tengo una primera inquietud concreta. En el artículo correspondiente de este proyecto se da una definición que es compleja, no soy una experta, pero prefiero una más simple, como la que tiene el Protocolo de Cartagena que habla de que un organismo genéticamente modificado es cualquier organismo vivo que posea una combinación nueva de material genético que se haya obtenido mediante la aplicación de la biotecnología moderna. Es más simple, menos complicada y reconocida mundialmente. En cambio, la que veo aquí expresa, por ejemplo, que tiene que ser de la misma especie y que tiene que haber algunas otras acotaciones, que creo podrían complicarnos; prefiero definiciones más simples.
Pertenezco al área de Medio Ambiente de la Cancillería pero también tenemos representantes que se ocupan de negociaciones comerciales, agricultura y del Codex, que tienen sus puntos devista. Quizás en este tema de definiciones sería bueno prever que eventualmente, en el futuro, en los ámbitos internacionales pudiera haber alguna modificación producto de nuevos avances en biotecnología porque, como ha dicho el secretario Regunaga, hay una evolución constante al respecto.
Además, tenemos otra inquietud. En la negociación de ese protocolo hubo una gran insistencia de los países exportadores, como es el caso de la Argentina, con respecto aque se hiciera una división entre los organismos biomodificados para ser introducidos en el ambiente y los commodities, o sea aquellos que se exportan para procesamiento, uso animal o alimentos.
Creemos que quizás en este proyecto se podría introducir la facultad de la autoridad de aplicación –la Secretaría de Agricultura- para llevar adelante un proceso simplificado, cumpliendo con las normas sanitarias; tenemos untexto que podemos facilitarles, cuando se trate de permisos quese hagan con la comercialización de commodities. Esta es una facultad que me parece sería bueno rescatar porque, además, está de acuerdo con el espíritu del protocolo de hacer una separación entre dos sectores que son evidentemente distintos, ya que uno podría implicar mayores consecuencias en el medio ambiente que el otro.
También deseo hacer dos comentarios sobre la redacción de los artículos 14 y 16 B, simplemente cuando hablan del impacto en los mercados. Creo que es un problema de redacción y tenemos algunos textos alternativos.
El artículo 16 b) dice: “Realizar la evaluación del impacto que tendrá el acceso en los mercados externos.”La diferencia es una cuestión de redacción porque entiendo la idea.
Acá se habla de la organización interna y se está reconociendo las que existe actualmente. De alguna manera se rescata la participación que le corresponde a la Cancillería en el ámbito internacional, facultades que son claras y que dependen de la ley de ministerios. No tenemos duda al respecto. Rogaría que se contemple el punto.
He mandado una propuesta de artículo para agregar. No hacemos una cuestión respecto a que debemos estar mencionados explícitamente, sino que en forma orgánica debenser rescatados todos los elementos.
Es una buena noticia desde el punto de vista de la percepción de la Cancillería que exista una señal de mayor comprensión del problema, si bien el tema de bioseguridad sigue siendo muy controvertido en el mundo y seguramente lo esen el orden interno. Inclusive a países como la Argentinaque estamos en desarrollo y somos exportadores de OGM, que enun principio eran un poco aislados y ahora no lo son tanto, se están sumando otros como por ejemplo, Brasil, China y la India. Japón también se agrega pero es un país desarrollado. Si continuamos con el serio trabajo que estamos haciendo, cumpliendo con todas las obligaciones y compromisos que emergen de los instrumentos internacionales y si nos preparamos adecuadamente como lo estamos haciendo a nivel nacional e internacional, realmente conseguiremos nuestros objetivos, tal como lo dijo el secretario Regúnaga. Haremos todos los cuidados que merece la bioseguridad.
Sr. PRESIDENTE (Peyrou).- Tiene la palabra el señor Ablin.
Sr. ABLIN.- Soy ministro y consultor de la Dirección de Negociaciones Económicas Internacionales. En elmarco de la inspección general de la embajadora Bondanza compartimos la validez, utilidad y equilibrio global del proyecto.
Me permito robar la atención de ustedes para formular un par de reflexiones porque creemos que es importante ponernos a disposición desde la perspectiva de los intereses comerciales argentinos.
Quiero dar un orden de magnitud de tipo comercial y de la significación en la estructura de exportaciones argentinas. Entre los cultivos que han sido más desarrollados en términos de estas nuevas tecnologías está la soja. Las exportaciones argentinas del complejo sojero en el 2000 estuvieron en el orden de los cinco mil millones de dólares, el veinte por ciento de las exportaciones totales. Esas exportaciones se dividen de la siguiente manera: las que se basan en productos genéticamente modificados ascendió al 85 ó 90 por ciento.
Con esto quiero decir que la Argentina, como primer exportador mundial de harinas y aceites de soja, se ha convertido en uno de los proveedores más importantes a nivel internacional de producciones basadas en esta tecnología. De forma tal que creemos que nunca más bienvenido como señaló la embajadora- contar con una estructura de esta naturaleza que apunta a los aspectos organizativos y a la estructura de aprobación y control de lo relativo a una tecnología que se ha probado muy útil comercialmente y que estimamos segura desde el punto de vista tecnológico.
Dicho esto, me gustaría concentrarme brevemente en dos reflexiones referidas al texto del Orden Día Nº 2819. Pido disculpas porque debido a que en nuestra área hemos tomado conocimiento muy recientemente de este texto -que sabemos que ha evolucionado mucho desde sus orígenes- no tenemos propuestas alternativas. Sin embargo, si eventualmente ustedes lo consideran de interés, con mucho gusto vamos a trabajar para brindar ese aporte.
El primer tema tiene que ver con el capítulo de definiciones en general. La embajadora ya ha hecho una referencia concreta al problema de la convergencia entre las definiciones del Protocolo de Cartagena y algunas definiciones contenidas aquí. Nuestra observación desde el punto de vista del área que represento es un poco más amplia en ese sentido y tiene que ver con el hecho de que en las definiciones hay aspectos como el de la llamada biotecnología moderna, contenida en el segundo párrafo, y algunas otras.
Al respecto, quiero recordar que en el plano comercial el acuerdo de medidas sanitarias y fitosanitarias en el marco de la Organización Mundial del Comercio, que es el que apunta a regular precisamente los aspectos técnicos de naturaleza sanitaria en el ámbito del comercio internacional, incluye como organismo referencial al Codex Alimentarius de la FAO, Organización Mundial para la Agricultura, y de la OMS, Organización Mundial parala Salud. De modo que la normativa y las definiciones que acepta el Codex Alimentarius se convierten inmediatamente en elemento referencial para la Organización Mundial de Comercio con las implicancias que esto tiene para cualquier recurso al procedimiento de solución de controversias en el marco de la Organización Mundial de Comercio.
Por ende, quiero comentar brevemente que en el ámbito del Codex Alimentarius estas definiciones en particular la de la biotecnología moderna- que pueden tener implicancias sustantivas para los productos procesados a partir de la inclusión de organismos genéticamente modificados, vienen siendo motivo de un largo debate desde hace un par de años, el cual se da en tres ámbitos. El primero de ellos es un grupo de trabajo especial que se creó para las definiciones en materia de organismos genéticamente modificados y que se va a reunir la próxima vez en Yokohama, Japón, en marzo del año 2002. Esto también se discute ampliamenteen el comité de principios generales, que es el comité horizontal del Codex, el cual da las definiciones para todo el tema y se va a reunir en abril del año próximo en París. Asimismo, esta cuestión se está discutiendo en el comité de etiquetado, que se va a reunir en mayo del año que viene en Halifax, Canadá.
Estos tres ámbitos han encontrado dificultades para esta convergencia muy útil a la que hacía referencia la embajadora, no en el plano de la definición de los organismos genéticamente modificados sino insisto- en las definiciones tal vez más detalladas y avanzadas relativas a los productos procesados que nosotros juzgamos que pueden llegar a tener implicancias comerciales.
Por ende, proponemos que el capítulo haga alguna referencia de tipo general a los compromisos futuros que pudieran surgir de los ámbitos multilaterales, en particular del Codex Alimentarius, porque creemos que ese es el foro en el cual mejor vamos a poder defender el interés nacional. Todo esto tiene que ver con el capítulo de definiciones.
Me permito volver con un tema que ya mencionó el embajador, y que tiene que ver con la creación del Comité Técnico Asesor de Mercados Agroalimentarios. Estamos particularmente satisfechos con la convalidación de las dos instituciones que ya existían porque ya hemos podido comprobar a nivel internacional el buen nombre de estos trabajos, pero vemos que se incorpora un tercer elemento que sustancialmente tiene que ver con el rol del comercio internacional, responsabilidad primaria de la Cancillería.
Por su parte me gustaría hacer una sugerencia con respecto a los artículos 15 y 16. Debo reconocer que desde mi modesto punto de vista en el artículo 15 tenemos dificultad para definir qué es lo interdisciplinario e interinstitucional y quiénes son los organismos competentes. Sobre todo sehabla de instituciones privadas competentes. Creemos que ameritaría, si los señores diputados lo creen oportuno, cuando se revea definitivamente el texto eventualmente introducir alguna precisión en ese sentido.
En cuanto al artículo 16, notamos que más allá de algunos defectos de redacción que ya se han mencionado, es un componente analítico importante. Creemos que lo que no se menciona es el objetivo que hay tras el componente analítico. Pensamos que debiera haber una referencia a que todo esto tiene que ver con la defensa y protección del acceso a los mercados por parte de la producción argentina. Creo que el objetivo, según su espíritu, es la protección al accesoa los mercados por parte de las producciones argentinas genéticamente modificadas.
Creemos entonces particularmente importante hacer una referencia global del artículo a este objetivo en relación con estas tareas que se asignan al comité.
Sr. MERENSON.- En primer lugar quisiera agradecer a la Presidencia de la comisión la invitación quenos han formulado para estar hoy aquí presentes. Es la primera oportunidad que tiene la Secretaría de Desarrollo Sustentable y Política Ambiental de intervenir en el tratamiento de esta iniciativa.
Lamentablemente no lo pudimos hacer en las etapas tempranas, lo que motiva que hoy quizá lo que realmente pretendenser aportes a esta iniciativa pudieran llegar a parecer cuestionamientos o palos en la rueda de una iniciativa legislativa que resulta tan urgente como necesaria para nuestro país. Sostenemos que es una legislación importantísima no sólo por los aspectos económicos y sociales que muy bien describió el ingeniero Regúnaga sino fundamentalmente por cuestiones que hacen al ambiente.
Estamos hoy debatiendo o intercambiando ideas sobre un proyecto de bioseguridad porque entre otras cosas la comunidad científica internacional en su momento, y luego la comunidad internacional, fue convergiendo en la preocupación referida por un lado al proceso alarmante de pérdida y erosión de la diversidad biológica en el planeta, y particularmente en materia de biotecnología y seguridad en la biotecnología. Esto llevó a que por ejemplo en la cumbre de Río de Janeiro, en el año 1992, la agenda 21 tuviera un capítulo específico el XV- de conservación de la diversidad biológica. Y no es casual que el Capítulo XVI fuera sobre la gestión ecológicamente racional de la biotecnología.
De allí se desprendió, como ustedes saben, el convenio de biodiversidad que en el artículo 19 introduce el tema de la gestión de biotecnología y distribución de sus beneficios. Allí ya le trasmite a las partes la necesidad de explorar un protocolo específico de seguridad en la biotecnología que se vio concretado en lo que hoy todos conocemos, y que bien describió la señora Bondanza, es decir, el Protocolo de Cartagena.
Entonces, éste es el marco de referencia internacional y como nuestro país es firmante y participó del convenio de biodiversidad está incorporado en nuestra Constitución Nacional. Por lo tanto, cuando hablamos de una legislación específica de bioseguridad estamos con ese fondo legal, tanto nacional como internacional, que nos sirve de referencia.
La Secretaría de Desarrollo Sustentable y Política Ambiental entiende que la biotecnología constituye un avance importante para toda la humanidad, no sólo en el campode la agricultura y de la alimentación sino también en otras esferas de aplicación de sus productos, pero también entiende que estas aplicaciones deben hacerse garantizando el máximo nivel de seguridad.
En este sentido, la legislación internacional no parcializa el tratamiento de bioseguridad en materia de algunas de sus aplicaciones mientras que el protocolo lo hace a nivel global de todas sus aplicaciones. Si bien la embajadora Bondanza menciona como excepcióna los productos farmacéuticos, debemos decir que el artículo 5º del Protocolo establece que ellos quedan exceptuados en la medida en que estén contemplados en otros acuerdos y organizaciones internacionales pertinentes. Quiere decir que en la medida en que no lo estén algunos de ellos también podrían llegar a quedar dentro de lo normado por el Protocolode Cartagena.
Si tomamos en cuenta la legislación comparada, podemos citar el caso de España, donde la legislación en materia de seguridad en biotecnología no distingue en cuanto a las aplicaciones y es genérica a todos los organismos modificados genéticamente. Incluso, se crea una comisión específica para hacer las evaluaciones, es decir, una comisión nacional de bioseguridad, entonces, siempre se trata del campo genérico y no parcial.
Quiero hacer una primera observación con respecto aque hubiéramos preferido que en materia de bioseguridad y biotecnología el tratamiento no se hiciera en forma parcial sino que se legisle en forma global. No obstante ello, y en el entendimiento de que estamos en un estado bastante avanzado del tratamiento de este proyecto, y si se consolidara la idea de legislar sólo en materia de seguridad en la aplicación dela biotecnología agropecuaria, una primera observación se refiere a que sería importante evaluar si no convendría hacer esto como un presupuesto mínimo.
El presupuesto mínimo no está presente en los términos del artículo 41 de la Constitución Nacional. Me parece que así como el convenio forma parte de nuestra Constitución, es obvio que el artículo 41 establece al Poder Ejecutivo la facultad de establecer presupuestos mínimos de protección ambiental.
Pero esto también tendría un correlato que ya es de naturaleza de seguridad jurídica para las mismas iniciativas e inversiones que se pudieran hacer en el campo dela biotecnología. En la medida en que esta legislación no fuera de un presupuesto mínimo, se podrían generarlegislaciones provinciales que podrían no ser estrictamente coordinadas con los presupuestos mínimos que se establecen aquí, y esto podría generar un escenario anárquicopara la liberación segura de organismos genéticamente modificados al medio.
También creemos que hay una observación que esde forma. No sé si quizá el nivel de detalle que estamos utilizando sea el que se pretendía en esta reunión, pero como no son tantas las observaciones, creo que es válido hacerlo presente aquí. En el artículo 2º, cuando se establecen los principios generales del marco regulatorio, se dice que se hacen tres etapas de evaluación previa. La primera es la que evalúa el riesgo y los beneficios ambientales originados en la producción. Sin negar que los organismos genéticamente modificados en sus usos agropecuarios tienen aspectos benéficos -el ingeniero Regúnaga los detalló-, como es por ejemplo el menor uso de agroquímicos, la conservación del suelo, etcétera, si estamos legislando en materia de la biotecnología, no se evalúa otra cosa que los riesgos. Es decir, no tiene una razón clara o comprensible, al menos para nosotros, en esta etapa estar evaluando beneficios ambientales que son además por todos conocidos.
Además creemos que en el artículo 5º, sobre información pública, debería incorporarse un párrafo que disponga un conocimiento general a los fines de que haya la menor restricción posible a la información pública que se genere en todos estos procesos de evaluación y aprobación.
En el artículo 6º, sobre autoridad de aplicación, encontramos una observación importante pero no por ello imposible de subsanar. Es la siguiente: si se legislara en materia de biotecnología y bioseguridad en forma global, la Secretaría de Desarrollo Sustentable y Política Ambiental, que por la ley 24.375 es el órgano de aplicación del convenio de diversidad biológica, debería también ser la autoridad de aplicación de una normativa global sobre este tema.
Ahora bien, si se va a legislar específicamente en biotecnología agropecuaria, entendemos que la Secretaría de Agricultura, como está en el proyecto, debería ser la Autoridad de Aplicación. Pero queremos diferenciar lo que significa autorizar una liberación de evaluar el riesgo. Nosotros sí sugeriríamos en este punto, como una cuestión de fondo, que en el artículo 8º, que convalida la creación de la CONABIA en al Secretaría de Agricultura, se evalúe la posibilidad de que en lugar de establecer esta etapa -y hay una legislación que respalda nuestras competencias en la materia- se debería crear una comisión nacional asesora de seguridad de la biotecnología que funcione en el ámbito de la Secretaría de Desarrollo Sustentable y Política Ambiental, la que tendría competencia global sobre seguridad de la biotecnología y por lo tantotambién tomaría parcialmente la evaluación de todas las presentaciones de liberación de organismos genéticamente modificados. El dictamen que se generaraen esta comisión sería elevado a la Secretaría de Agricultura, que retiene dentro de su ámbito a los dos comités, el comité técnico sobre uso de organismos genéticamente modificados en el mercado.
Con esos tres asesoramientos, obviamente estaría en condiciones de definir la conveniencia o no de autorizar una liberación.
Otra de las observaciones que tenemos consiste en proponer que en este proyecto se incorpore la figura de un registro nacional de biotecnología agropecuaria -aclaro que de todas estas observaciones tenemos texto que vamos a hacer llegar al presidente de la comisión-, la posibilidad de establecer una tasade inscripción y verificación en este registro, la necesidad de establecer un sistema de regulación, gestión y control de riesgo -que tendría que proponerlo la Comisión Nacional de Seguridad en la Biotecnología- y la creación de un fondo de bioseguridad agropecuaria, con algunas modificaciones respecto del propuesto en el proyecto.
A grandes rasgos, éstas son las observaciones que la Secretaría de Desarrollo Sustentable y Política Ambiental quiere traer a esta reunión. Reitero que para cada observación disponemos de una propuesta de modificación e incorporación al proyecto de artículos específicos.
Por último, rescatamos la importancia que tiene para el país contar en forma urgente con una legislación en la materia, y resaltamos el esfuerzo que se ha hecho con este proyecto al encarar un tema tan complejo como es la seguridaden la biotecnología en una forma realmente comprensible, sencilla, aplicable y poco burocrática.
Sr. PRESIDENTE (Peyrou).- Tiene la palabra la señora Vainstok.
Sra. VAINSTOK.- Soy la coordinadora del Comité de Ética en la Ciencia y en la Tecnología creado hace muy pocos meses en el ámbito de la Secretaría para la Tecnología, la Ciencia y la Innovación Productiva.
La práctica de incorporar la dimensión éticaen el análisis de la legislación que involucra nuevas tecnologías es usual en los países desarrollados y cercanos, y en este caso se inaugura con el tratamiento queestamos haciendo de este proyecto.
Este primer período de evaluación éticade un proyecto de ley nos ha permitido comenzar una práctica democrática, pluralista e interdisciplinaria porque este Comité de Ética incorpora investigadores que provienen de distintas disciplinas, y además intenta incorporar lasvoces de todos aquellos involucrados y afectados por la legislación o las medidas que se toman.
Desde una perspectiva ética, la evaluación de este tipo de leyes que involucran la aplicación y usosde investigación tecnológica y la normativa que intenta regularlas, debe tomar en cuenta una serie de principios. Uno de ellos es el beneficio que se aporta y el respeto que se guarda a los derechos de las personas y a los seres vivos en su conjunto, los riesgos que presenta para el presente y para las generaciones futuras, y la prudencia responsable que debe ser incorporada apropiadamente en las normas y principios de justicia propios de la ética. Esto obliga también a considerarlos cambios que las tecnologías introducen en las prácticas productivas y en las condiciones impuestas a los medianos y pequeños productores rurales y las nuevas previsiones que han de adoptarse para asegurar la capacidad de estos sectores para afrontar competitivamente las condiciones de concentración y centralización de los mercados y las nuevas imposiciones que de algún modo la asistencia de los organismos genéticamente modificados generan en las relaciones entre los países desarrollados y los países endeudados como el nuestro.
La actividad del comité de ética es analizar ésta y otras normas en el futuro a fin de generar en la sociedad la confianza en las instituciones y en los mecanismos regulatorios, sin lo cual ninguna prueba creíble que los científicos o las instituciones regulatorias aporten influirá en la opinión pública, y crear confianza ademásen la responsabilidad de los legisladores frente a las necesidades y derechos de los ciudadanos.
Estamos de acuerdo en la importancia de esta ley, en la necesidad de que se legisle sobre una situación que de hecho existe en la Argentina. También hemos consensuado que la categoría de transgénico no es buena ni mala en sí misma. La transgénesis es sólo una metodología que modifica caracteres genotípicos; darle la calidad de bueno o malo dependerá de los casos particulares y de los controles que ejerzan los organismos que resulten en la aplicación de esta metodología.
Esto establece la necesidad, marcada en el proyecto de ley, de realizar testeos a priori sobre los organismos genéticamente modificados antes de ser habilitados para su uso. Pero la legislación no asegura la incorporación de las conclusiones de las evaluaciones. Éstas deben ser periódicas, porque un organismo después de un control puede aparecer como no dañino y serlo después, ya sea porque han aparecido nuevas metodologías que permiten un mejor análisis de sus efectos o porque los efectos que produce en el medio ambiente no fueron previstos o no podían ser previstos en el momento de su liberación. Por lo tanto, un primer tema que nos preocupa es la consideración de un seguimiento en los controles.
En el análisis de los riesgos y beneficios de una legislación como ésta no se pueden ignorar las repercusiones que la liberación de los organismos genéticamente modificados puede causar en los distintos sectores sociales. Esto presenta un escenario que incluye distintas cuestiones. Una de ellas esla calidad de los organismos OGM hasta este momento, que requieren que las semillas sean utilizadas para uno o dos cultivos, lo que obliga a los productores a volver a comprar semillas.
Por otro lado, estos organismos han sido introducidos en el campo en forma de paquetes tecnológicos y, si bien disminuyen los costos por términos de herbicidas y otros conceptos, generan una dependencia del productor con respecto a la tecnología que es difícil y debe ser abierta y considerada según los riesgos.
Quiero explicar que con la evaluación de este proyecto hemos inaugurado una práctica, por lo tanto, hemos tenido que aprender la diferencia entre sumar opiniones y producir una aproximación multidisciplinaria. Entonces, como muchos de nosotros provenimos de los ámbitos académicos, comenzamos haciendo una evaluación de pares, como si estuviéramos evaluando un proyecto del Conicet, y nos dimos cuenta de que la cuestión no era ni es así. Digo esto porque las recomendaciones finales de este comité no están listas ya que cada vez que abríamos un área se iba sumando la necesidad de incorporar voces. Nuestro deseo y responsabilidades hacer que este proyecto sea aprobado con todo el respaldo necesario para que funcione.
Entonces, primero conversamos con los biotecnólogos, elegimos a los mejores, después pedimos la opinión de los abogados y especialistas en patentes, luego llegamos a los ecólogos, que siempre tienen misiones tan amplias que resulta difícil traducirlas en normas legales así como también no les resulta fácil leer las normasincluidas en este proyecto y, finalmente, terminamos con los productores.Por este motivo este comité ha trabajado realmente con pasión en el tema y al escuchar las voces de los productores surgieron dudas de por qué somos el segundo paísen incorporación de organismos genéticamente modificados en el campo de la soja cuando la situación de nuestros medianos y pequeños productores, un sector que la legislación estaba obligada no sólo a considerar sino a proteger tomandolos recaudos necesarios, no es sencilla. No estoy hablando de los que viven en las zonas inundadas, porque entraría en otra problemática, pero hemos empezado a conversar con productores de Santa Fe y hemos visto que, por ejemplo, la escala de producción no puedo decir OGM y es muy largo decir organismos genéticamente modificados- ha crecido. Entonces, lo que era la escala promedio de 180 hectáreas ya no es compatible con una supervivencia razonable del productor.
Las grandes compañías productoras de los organismos genéticamente modificados han cortado el acceso al crédito para los pequeños y medianos productos dada la situación que atraviesan. Parecería que la tendencia con la introducción de este tipo de semillas en el campo lleva a la supervivencia de los más grandes y desaparición de los más pequeños.
Esto no es una condición intrínseca de la incorporación de organismos genéticamente modificados, sino que la condición deriva de los recaudos y medidas especiales que se adopten para que eso no ocurra.
Yo decía que este organismo viene en paquetes tecnológicos. La apertura de estos paquetes significa el apoyo a la capacidad de investigación científica y tecnológica local; esto ocurre en todas partes del mundo.
A fines de los 90 hubo un cambio paradigmático: en todos los análisis sobre el cambio tecnológico, de la introducción de innovaciones y aquellos que decían que aprendían de los demás haciéndolo como decían los economistas evolucionistas- han tenido que reconocer que cometieron un error intelectual grave. Por lo tanto, es necesario incorporar la necesidad de investigación básica local, las capacidades científicas propias de cada paísy de los sectores directamente involucrados y en situación de riesgo.
No basta con la palabra control. Hace falta decir cómo se va a controlar y qué condiciones existen en el paíspara hacerlo. Eso hace necesario recorrer la situación del INTA, del CONICET y de las universidades nacionales en términos de financiación de la investigación.
La biotecnología es un avance del conocimiento, pero no es buena ni mala tal como ocurre con sus productos. El avance del conocimiento debe ser incorporado. No estoy proponiendo un saber nacional y popular, simplemente propongo un saber sustentado, serio, de aquellos que están capacitados y que conocen los problemas locales.
Este proyecto de bioseguridad en la biotecnología aplicada a la agricultura no contempla la bioseguridad de aquellos que investigan estas metodologías. Las condiciones de seguridad de los laboratorios en la Argentina son pésimas, no existen, no hay normas ni conciencia sobre la necesidad de cuidarse para el aprendizaje y para difundirlo en la sociedad.
No hacemos esta tarea de manera desapasionada; tratamos decumplirla con la mayor honestidad intelectual y rigor que podemos, pero en este proyecto está en juego un precedente y la posibilidad de enseñar y de hacer confiar a la población en que los legisladores pueden contemplar adecuadamente todas aquellas condiciones necesarias para que algo como en este casola posibilidades que propone la biotecnología- sea incorporado en una norma que asegure que los mayores beneficios y los menores riesgos serán previstos siguiendo además el principio fundamental de la equidad y la justicia.
Sr. PRESIDENTE (Peyrou).- Queda abierta la ronda de consultas.
Les informo que como la diputada Müller debe retirarse, quedará la señora diputada Lissi, vicepresidenta de la Comisión de Recursos Naturales, en representación de dicha comisión.
Tiene la palabra el señor diputado Briozzo.
Sr. BRIOZZO.- En primer lugar agradezco a quienes nos visitan hoy por las valiosísimas opiniones que nos han brindado.
Como ustedes saben, desde abril del año pasado un grupo importante de diputados hemos empezado a analizar y a discutir este tema. En la Comisión de Agricultura y Ganadería llevamos a cabo junto con el señor diputado Volando la primera mesa de debate sobre esta cuestión en abril del año pasado. A partir de allí empezamos a analizar la posibilidad de legislar en la materia.
Valoro muchísimo todo lo que han dicho ustedes porque lo que quisimos quienes impulsamos este proyecto fue que tuviera una relación muy concreta con la postura que la Argentina tiene tanto en los distintos foros internacionales como a nivel interno. Inclusive hemos seguido todas las negociaciones que se vienen realizando en la Organización Mundial de Comercio, en la FAO y en el Codex Alimentarius sobre todo lo vinculado conel protocolo de bioseguridad. Hemos visto cuál es la postura de la Argentina en este sentido y hemos hablado muchísimo en los distintos organismos públicos con quienes tienen algo que ver con la aplicación de este tema. En este sentido, nos hemos conectado con la Cancillería, con la Secretaría de Agricultura y hemos hablado varias veces con el anterior secretario de Medio Ambiente. Personalmente le he entregado en mano hace casi un año una revista de la que hicimos dos mil números- donde planteábamos el proyecto. También entregamos en mano el proyecto al doctor Carrasco, que está aquí presente, y a la señora secretaria Adriana Puiggrós para que opinaran. Algunos organismos públicos nos enviaron sus muy valiosas opiniones por escrito, como es el caso de la Cancillería y de la Secretaría de Agricultura, pero hasta ahora no nos ha llegado opinión por escrito de la Secretaría de Medio Ambiente y de la Secretaría de Tecnología y Ciencia, aunque aquí ya tuvimos una primera opinión…
Sra. VAINSTOK.- Debo aclarar en primer lugar que la secretaria para la Tecnología, la Ciencia y la Innovación Productiva pasó a este Comité de Ética inaugurando este procedimiento de evaluación normativa; en segundo término debo decir que estoy acá de prestado porque si bien yo soy la coordinadora del Comité, el relator paraesta ocasión debía ser Alberto Conde, quien hoy no ha podido venir.
Pero la Secretaría está presente. No ha sidoa causa de demoras de la Secretaría sino de que este comité considera que debe tomarse todo el tiempo necesario para hacerlos mejores aportes a esta legislación tan importante.
Sr. BRIOZZO.- Estoy totalmente de acuerdo. Esto viene bien no para aclarar sino para enfatizar un tema que tiene que ver con que nos han planteado que supuestamente algunos diputados que estaban impulsando este proyecto tendrían cierto apuro por sacar la ley. Aclaro, en función de lo mencionado, que ocurre exactamente lo contrario.
Hace dos años que estamos trabajando con este tema. Han pasado por comisión y han participado más de cien diputados; han firmado las distintas variantes de este proyecto 92 diputados, entre los 15 que lo presentamos inicialmente y los que lo firmamos después. Hubo un problema específicamente con la Comisión de Medio Ambiente. Hemos hecho un acuerdo con la presidenta y la vicepresidenta de la comisión parano tratar el proyecto que está en el Orden del día hasta tanto la Comisión de Medio Ambiente pueda expedirse. No tenemos ningún apuro. Obviamente aspiramos como el proyecto vence a fin de mes- a que pueda tratarse este año, perono tenemos ningún problema, porque la mayoría de quienes impulsamos este proyecto seguimos hasta el 2003. No tenemos inconveniente alguno si no llegamos; podemos volver a presentarlo y tratarlo el año que viene, porque lo creemos de enorme importancia. Incluso las opiniones que hemos escuchado, creo que un poco enfatizan esto.
En los últimos meses algunos diputados defendíamos una cosa y otros otra, con supuestas ideas e intenciones. Si algo queda en claro es que Argentina tiene una posición internacionale interna muy clara. Así se ha expresado en la opinión de la Cancillería y de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación. Algunos diputados que promovemos este proyecto hemos hecho muchísimo esfuerzo para que este proyecto tenga que ver con esa posición que tiene la Argentina, que no es compartida por todos. Esto es muyclaro.
Muchas veces las disidencias con el proyecto tienen que ver con la postura nacional e internacional de nuestro país respecto a este tema. Esas disidencias son sumamente atendibles, pero creo que la disidencia de fondo es de política internacional, la disidencia acerca de cómo debe ser la política agrícola en Argentina; es en función de ello quese da la disidencia en el proyecto.
Me parece fundamental que haya una postura política muy clara acerca de este tema y que esa postura se exprese en los instrumentos, como ocurre con la Unión Europea. La última directiva que están tratando de homogeneizar, respecto al etiquetado, tiene que ver con una política, no con una posición intelectual. Esa posición la han explicado claramente en Bruselas quienes llevan adelante la política agrícola común. Plantean que necesitan ganar tiempo.
Estados Unidos nos ha sacado cinco años en biotecnología. Tenemos que recuperar ese plazo. Mientras tanto paramos, detenemos. Hay muchísimos argumentos.
La Unión Europea tiene una política en este tema, Estados Unidos tienen otra; los países del Sur tienen distintas políticas y Argentina también tiene una. Nosotros aspiramos a que lo que finalmente votemos tenga que ver con la política argentina. Por eso es que no estamos apurados.Todo lo contrario.
Nos queremos dar todo el tiempo necesario, primero para ayudara que Argentina tenga una política de Estado en este tema, que me parece central dada la importancia que tiene esta temática en nuestro país. Tiene que haber una política de Estado que incluso esté más allá de cuestiones partidarias, que sea apoyada por todos los sectores. Creo que esto ayuda porque pone en blanco sobre negro acerca de cuáles la política y cuáles son las diferencias.
Quiero hacer un comentario. Se han planteado muchísimas propuestas de modificación. La mayoría son muy oportunas según mi entender.
Muchos señores diputados van a hacer uso de la palabra pero simplemente deseo expresar que hace dos semanas quince diputados de la Comisión de Recursos Naturales y Conservación del Ambiente Humano mandaron una nota a la presidenta de la comisión y al presidente de la Cámara proponiendo modificaciones al proyecto. Personalmente, estoy de acuerdo con la mayoría de ellas que contemplan el 90 por ciento de los planteos que usted formuló relacionados con la información pública y la creación de un registro y de un fondo.
Entonces, el asunto ya está contemplado, ha sido firmado por quince señores diputados y podrá observar que muchas de las modificaciones que usted plantea están contempladas allí.
Sr. PRESIDENTE (Peyrou).- Quiero recordar a los señores diputados que esta reunión ha sido organizada básicamente para escuchar a distintos funcionarios del Poder Ejecutivo y les solicito que no hagamos hoy un debate sobre el tema, que será motivo de otro encuentro.
Deseo pedir disculpas al señor Andrés Carrasco, presidente del Conicet, porque todavía no ha hecho uso de la palabra.
Sr. CARRASCO.- En primer lugar, quiero decir que estoy absolutamente de acuerdo no sólo con el lugar en el que me toca hacer uso de la palabra sino con mi función, esdecir, como miembro de la comunidad científica, de alguna manera e indirectamente en mi rol de conocedor de estos temas.
No voy a tomar tampoco el lugar del relator, Alberto Conde, quien hoy debería estar aquí presente, sin embargo quisiera decir algunas cosas.
En primer lugar, considero que es absolutamente necesaria una legislación. Hace unos años tuve oportunidad de participar como asesor de la Comisión de Ciencia y Tecnología y siempre estuvo latente esa necesidad de tener normativas que, en mi opinión, acrecentaran los controles y dieran marcos de seguridad legales a este aluvión tecnológico, sobre todo cuando estamos trabajando con organismos vivos. Digo esto a fin de dejar expresada mi total complacencia con respecto a que esta normativa llegue a existir.
En este momento, lo que se comercializa en el mundo –tomemos la soja o algún maíz que anda por allí- son productos para investigación de empresas privadas. Porlo tanto, esto no deviene de un sector académico puro sinode una lógica legítima, producto del proceso de investigación -en la mayoría de los casos- realizado por el sector privado.
Todos conocen el famoso proyecto Terminator. Debido a una enorme resistencia del sector académico de los Estados Unidos su autor tuvo que pararlo porque precisamente avanzaba sobre la fabricación de semillas que duraban una sola generación, luego esa semilla moría obligando a los productores a comprarla todos los años.
Estamos hablando de un desarrollo biotecnológico deuna enorme envergadura, complejísimo, con cinco o seismodificaciones genéticas. Esto está expuesto eninformes en Internet. Como producto existe una lógica.
Pero acá estamos usando la lógica del Estadocon el fuerte soporte del sistema científico tecnológico público. También estoy de acuerdo en que toda la legislación debe estar acompasada con los compromisos que tenemos y los que tendremos. En el marco internacional estoy de acuerdo con el director nacional.
Quisiera meterme en mi especialidad y decir que no sé si podemos hablar de riesgos. Los organismos internacionales no están absolutamente de acuerdo en la forma de manejar estos temas y hay posiciones encontradas dentro de las Naciones Unidas y así ha sido expuesto públicamente.
Hace un mes, en la revista “Science”, apareció un artículo de un grupo belga sobre la semilla de soja transgénica de Monsanto. Allí determina que explorando, experimentando y comprobando descubrió que las modificaciones genéticas descriptas por la compañía tenían algunas características que no habían sido denunciadas en sus mecanismos de control. Habían aparecido cinco oseis pequeños fragmentos de material genético de origen desconocidos que fueron detectados por ese grupo belga y hubo un cimbronazo. Esto no implica un riesgo necesariamente sino que el material genético de la semilla no estaba debidamente comunicado por la compañía y si lo sabíano lo había hecho, o tal vez había protocolos queno había encontrado o comunicado.
No quiero con este comentario poner un paño de dudas sobre los riesgos potenciales. Sí quiero decir que los productos tecnológicos a veces se pueden controlar fehacientemente y a veces, por problemas técnicos, hay pequeños accidentes en los desarrollos que se descubren con el tiempo.
Hay algunas otras comunicaciones sobre la variación o la diferencia comparando soja wild type, o soja salvaje, con la transgénica, donde hay deficiencias de algunos aminoácidos. Por lo tanto, sin entrar en mayor profundidad, lo que pido como científico, ya que he participado en algunos congresos científicos donde se discutieron estos temas y otros relacionados, es la preocupación de la comunidad científica internacional sobre la manera en que se liberan estos productos y cuáles son los mecanismos de control del Estado.
En mi opinión, el proyecto debería abundar en estos detalles y ser estricto en estas cosas. Debería haber un control permanente ya que los organismos vivos, más allá de las modificaciones genéticas que se produzcan hasta cierto punto, tienen comportamientos evolutivos y en la replicación de las especies puede haber cambios espontáneos en su material genético, en sus hijos que no estaban en sus padres.
Debe hacerse un control permanente en el país sobre las características genéticas sobre cualquier organismo que vaya a ser liberado al mercado. Debería participar aquí la comunidad científica y los laboratorios adecuados de biotecnología permanentemente. El Estado tendría que contar con una estructura de control más allá de lo indicado adhiero a algunas expresiones anteriores- y tendría que hacer controles cruzados de riesgo y de calidad del producto. Como ciudadano, por lo que me toca gestionar, y como científico, he sido un prudente crítico de estas iniciativas. Se encuentran numerosísimos ejemplos en la historia de la medicina que indican que cuando los productos de investigación de una gran corporación o de un gran laboratorio se largan, cinco, seis o siete años después se encuentran resultados no esperados.
Quisiera explicar esto, y si después surge alguna pregunta daré más precisiones.
Así como Estados Unidos tiene un 20 por ciento de preservación de la superficie sembrable para mantener la soja wild type, lo que podría llegar a permitirle establecer políticas de semillas transgénicas versus no transgénicas y acomodarse a los distintos mercados, considero que no es bueno tener en este momento un país muy débil en los bancos que mantengan la biodiversidad de las especies vegetales de consumo. Es decir que debería tenerse el recaudo de contar con bancos de semillas muy bien afianzados para mantener los equilibrios ecológicos dentro de las poblaciones bioestables y mantener superficies de mínima de cultivo de lo que nosotros llamamos cepas salvajes de semillas.
Por lo tanto, insisto en que resulta sumamente importante tenerun marco normativo con la direccionalidad que ha tomado, pero pediría a los señores legisladores que acentúen estos recaudos tal como lo expresó la señora Vainstok-sobre la base de algunas cuestiones que pueden ir sucediendo y que se nos pueden escapar si no las tenemos en cuenta.
Sr. PRESIDENTE (Peyrou).– Tiene la palabra el señor diputado Volando.
Sr. VOLANDO.- Me anticipo a decir que tengo un gran respeto por todos aquellos que se preocupan por el bienestar y por los riesgos reales o potenciales que podemos sufrir en este aspecto.
Considero que respecto de este proyecto se está cumpliendo con lo que corresponde, en la medida en que se han hecho y siguen efectuándose consultas y además se tienen en cuenta las observaciones. Es decir que más allá de lo que cada uno piense sobre los riesgos que se esgrimen, evidentemente se tiene en cuenta a todos para tranquilizar el estado de ánimo de la gente, tanto de productores como de consumidores, tema que hoy está en el tapete y que resulta polémico.
No obstante ello, cuando se debaten estas cuestiones me hace acordar a la época de mi abuelita. En aquel entonces, cuandose advertía sobre la necesidad de que cumpliéramos con determinadas instrucciones, órdenes o costumbres, oque dejáramos de hacer determinada cosa, nos amenazaban con el hombre de la bolsa.
Tengo que confesar que nunca estuve tète a tète con el hombre de la bolsa, pero yo y mis amiguitos de aquel entonces estábamos impresionados, por cuanto cumplíamos con las instrucciones, no sólo porque estuviéramos convencidos sino porque teníamos miedo o temor. Lo cierto es que con el correr de los años nunca pude conocer al famoso hombre de la bolsa, pero por aquel entonces lo que sí dejamos de visitar fue la quinta del vecino que tenía unas higueras bárbaras, sobre todo cuando el higo estaba maduro y elojo de la “vieja” empezaba a libar el néctar; lo cierto es que lo mirábamos de afuera pero nunca nos animábamos a pasar.
Me parece bien haber disfrutado de estas consultas y además creo que se han hecho aportes considerables. Estamos luchando contra algunos elementos científicamente demostrables porque se pueden demostrar- y un temor que se ha generalizado pero queno tiene a mi juicio el peso como para poder frustrar determinadas medidas. En el fondo hay políticas que actúan como medidas para estatales para que tengamos mayores dificultades en la colocación de nuestros productos.
Dicho esto quiero agregar que lo que me ha parecido muy pertinente y válido son los argumentos que se han volcado respecto a las dificultades o la imposibilidad de poder tener acceso determinados productores chicos a estos avances tecnológicos. Esto es real, está ocurriendo en nuestra Argentina.
Por supuesto hay un avance de determinados entes multinacionales de carácter monopólico. Creo que este elemento, a pesar de la enorme importancia y urgencia que tiene, escapa a los alcances de esta ley. Creo que habrá que redactar alguna otra ley en cuanto a la comercialización, el acceso al crédito, etcétera. Sin duda esto es imprescindible pero creo que escapa al sentir que tiene esta ley, que apunta a la biotecnología.
Sra. ESPÍNOLA.- En primer lugar quiero agradecerla presencia de todos los funcionarios que han venido con conclusiones y con el tema estudiado, sabiendo qué íbamos a debatir.
En segundo término quiero solicitar la información a la que se ha hecho referencia. Por ejemplo, en el caso de la Secretaría de Agricultura, sería importante ver si se puede alcanzar a la Comisión de Ciencia y Tecnología el texto completo de la conclusión del comisionado científico de la Unión Europeo para que podamos hacer el análisis pertinente.
En relación al concepto de Bioseguridad nosotros tenemos por supuesto las copias del protocolo de Cartagena, por cuanto veremos cómo se puede en el debate del texto final dejar esos anexos.
En cuanto al etiquetado, nos gustaría que el representante de Cancillería brinde una aclaración un poco más detallada acerca de cuál es el proceso que se está dando acerca de este tema con los organismos internacionales. Se ha hecho una aproximación al tema pero me gustaría saber si se pueden dar precisiones al respecto.
Deseo que obren en la comisión los textos completos de las propuestas realizadas por la Secretaría de Medio Ambiente. Además, si el Comité de Ética tuviera conclusiones hechas al respecto, quiero que también podamos contar con esa documentación para el momento en que se debata el texto definitivo. Por supuesto que también vamos a contar con las versiones taquigráficas.
Soy una de las autoras de las observaciones que se hicieron al Orden del Día 2819. En realidad, no voy a abundar demasiado adelantando el debate que existe entre los diputados con respecto a este tema pero voy a decir que, en principio, considero que hoy deberían haber concurrido funcionarios del área de salud, al menos del ANMAT que es el lugar donde se aprueban los alimentos que todos consumimos y que, obviamente, tienen que ver con ser todas aquellas cosas de las cuales nos alimentamos; hoy estamos hablando de estas cosas.
En este sentido, desde el principio y lamentablemente, por tratarse de una política de Estado -con lo que le cuesta al Parlamento como al Poder Ejecutivo poder tener miradas de carácter integral-, parece que estas faltas dan cuenta de estas cuestiones.
Mis observaciones se basaron esencialmente en la falta de esta mirada de política integral. Al ver cómo el organismo de aplicación o los comités asesores pueden tener un grado de efectividad o conclusiones que no sean sólode carácter asesor, en lo que se refiere a componentes tanto del área de salud como de medio ambiente, es que considero que están incompletos según este proyecto de ley.
Además, soy integrante de la Comisión de Recursos Naturales y Conservación del Ambiente Humano y secretaria de la Comisión de Acción Social y Salud Pública, esta última es cabecera de todos los proyectos de etiquetado -que son aproximadamente nueve-, y por ese motivo deseo una aclaración sobre el tema.
Creo que debemos hacer un esfuerzo para lograr el consenso, es lamentable pero no se buscó previamente de una manera integral para que este proyecto pueda aprobarse con todas las modificaciones que se le pueden proponer. Si no fuera posible llegar a un acuerdo, porque habría que rediscutirlo, creo que la envergadura de lo que estamos discutiendo hace que nos tomemos los tiempos necesarios para poder garantizarle a la gente, para eso estamos nosotros acá, todos los conceptos y seguridades relacionados con la aplicación de la biotecnología en todos los campos.
Hoy estamos hablando de la agricultura y cuando se abra la discusión sobre el tema de los medicamentos seguramente tendremos mucho que decir al respecto y debemos tener, por nuestra función y rol, ustedes sabrán comprender, una mirada sumamente atenta a todo lo que se relacione con cristalizar enla legislación conceptos que tengan que ver con la calidad de la vida de las personas.
Sr. PRESIDENTE (Peyrou).- Me parece interpretar que del conjunto de los temas que la señora diputada ha planteado al tema del etiquetado le está faltando una respuesta.
Sra. BONDANZA.- Deseo expresar que la Cancillería envió su primer aporte cuando recibimos la primera versión del proyecto.
A la luz de que vemos que se ha ido enriqueciendo el tema yque se ha sumado una propuesta de modificación muy valiosa, y como siempre estamos estudiando el tema, nosotros vamos a enviar por escrito con posterioridad una posición final. No se asusten, no vamos a cambiar todo, pero simplemente a la luz delas observaciones que hemos ido adelantando vamos a enviarles por escrito nuestros comentarios, creo que hay una receptividad general y ha habido mucha convergencia, cosa que nos alegra, para que puedan recogerlos.
Con respecto al etiquetado no sé si quieren tratarlo en esta oportunidad. Por lo pronto, el Protocolo de Cartagena está en una etapa donde no entra el etiquetado, estamos hablando de identificación. Después hay otros ámbitos donde se está tratando el etiquetado, el ministro Ablines el especialista aquí, pero no sé si quieren tratarlo ahora o que luego les mandemos información al respecto, que escaparía un poco a esta primera etapa.
Sr. PRESIDENTE (Peyrou).- Sería conveniente hacer una introducción.
Sr. ABLIN.- Voy a ser muy breve para que vean la complejidad de lo que está detrás de esto y después quedamos a disposición de ustedes.
El etiquetado del producto en el ámbito internacional tiene dos marcos de referencia que son importantes en el contexto de la normativa de la Organización Mundial de Comercio.
En primer lugar, hay un acuerdo sobre barreras técnicas al comercio y, en segundo término, otro que concierne específicamente a productos destinados a la alimentación, medidas sanitarias y fitosanitarias.
Estos dos acuerdos tienen un elemento sustantivo que hace a la doctrina del sistema multilateral de comercio que concierne a la no discriminación, uno de los pilares básicos del sistema. Sobre esto ha habido diversas cuestiones en la historia del GATT, buscando una interpretación sobre la discriminación a través de cualquier instrumento que se oriente hacia el proceso por el cual ha sido producido, más allá de la naturaleza.
Este es un tema sobre el que hay doctrina. La doctrina del sistema multilateral indica que los bienes no pueden ser discriminados acorde con el proceso que se utilizó para su producción, no obstante lo cual la aparición de nuevas tecnologías, como la que estamos discutiendo ha vuelto a establecer algunas controversias que quedarán.
Como creo haber dicho antes, ambos acuerdos, tanto el de barreras técnicas al comercio como el de medidas sanitarias y fitosanitarias,otorgan el carácter referencial a ciertas instituciones reconocidas internacionalmente en el ámbito de la normativa científica, en el caso que nos ocupa el CODEX alimentario.
El codex alimentario no ha determinado todavía, a pesar de los tres ámbitos que mencioné donde se está analizando la temática, una definición sobre la necesidad de establecer un etiquetado específico para esos productos.
El Comité de Etiquetado ha trabajado en este sentido y en la dirección de un marco general y de definiciones. Ha habido inclusive un problema técnico porque las definiciones estaban avanzando a un ritmo distinto que el marco general.
La comisión del Codex Alimentarius, que es el organismo supremo de la familia de comités del Codex, decidió en julio de este año que ambos niveles deberían ponerse a la par, para lo cual retrasó el debate sobre el tema de definiciones. Insisto en que se está trabajando. En el Codex no hay un consenso entre los actores, es decir, los Estados, sobre la necesidad o no de imponer una obligación. Sobre este tema se va a continuar trabajando y naturalmente sobre él podremos brindarles información en el futuro.
Sr. PRESIDENTE (Peyrou).- Tiene la palabra el ingeniero Merenson.
Sr. MERENSON.- Quiero hacer una aclaración respecto de que el uso del término etiquetado para el caso de transgénicos no es estrictamente correcto. De lo que se habla en transgénicoses de identificación y no de etiquetado. El etiquetado es la expresión de un esquema de certificación, lo cual expresa todo un proceso hacia atrás de producción normalmente asociado a certificar la sustentabilidad de un producto. En cambio, en el caso de transgénicos el debate no es sobre eso sino sobre identificar o no aquellos productos que sean transgénicos. Si bien ésta es una cuestión de terminología, es importante tenerla en cuenta.
Sr. PRESIDENTE (Peyrou).- Tiene la palabra la señora diputada Lissi.
Sra. Lissi.- Voy a hacer un breve raconto de lo sucedido.
Como vicepresidenta de la Comisión de Recursos Naturales y Conservación del Ambiente Humano debo aclarar que no hemos tenido tratamiento de este proyecto debido a una falencia que siempre existe en mesa de entradas del Congreso de la Nación. Allí, las personas que establecen los giros a las distintas comisiones a veces no leen todos los proyectos sino solamente los copetes, lo que significó que este proyecto tan importante para nuestra comisión no nos haya sido girado. Por lo tanto, osotros no tuvimos a la vista este proyecto en su momento, como sí lo tuvieron el resto de las comisiones a las que fue girado, y hace muy poco tuvimos conocimiento de que la iniciativa ya estaba muy avanzada en su consideración y que con el Orden del Día Nº 819 llegaba al recinto. Allí varios diputados empezaron a hacer sus cuestionamientos o propuestas, nosotros pedimos reuniones y el diputado Briozzo nos hizo llegar los proyectos y manifestó que estaba abierto al diálogo y a las propuestas que hiciéramos.
Esa es la historia de este tema. Por eso hace escasamente un mes hemos tratado este proyecto en la Comisión de Recursos Naturales, pero algunos diputados directamente ni siquiera quisieron considerarlo porque todos los aportes que se pudieran efectuar tanto de parte nuestra como de los asesores no iban a ser vinculantes por no tener giro oficialmente a nuestra comisión.
Esto hay que aclararlo. Es muy importante lo que manifestó el señor diputado Briozzo: no solamente estamos tratando un proyecto de ley sino que vamos a fijar una política para llevar a cabo por parte de un país referente a la producción no de productos genéticamente modificados.
Quiero agradecer muy especialmente el aporte de todos ustedes porque esto no fue hecho en su momento. Justamente en el día de ayer algunos diputados del radicalismo hemos elaborado un documento por el cual vamos a convocar a un gran congreso nacional parael desarrollo y la producción en nuestro país.
Si uno se pone a analizar todas las políticas que se han venido llevando a cabo en nuestro país, lo que queda bien en claro es que la Argentina ha tenido un Estado desertor en lo relativo a los controles. Por eso llegamos a la situación actual, en la que tenemos muchísimos entes estatales, municipales, provinciales y nacionales y pareciera que nunca hay un responsible absolutamente de nada porque faltan los controles. Por eso es muy importante el aporte de la señora Vainstok desde el punto de vista ético y científico: debe darse importancia a los controles, asegurarse de qué tipo de controles se trata y garantizar con qué cuenta nuestro país para efectuarlos. De lo contrario sí podemos correr el riesgo de legalizar, dictar una norma sobre algo que ya se viene haciendo de hecho: millones y millones de hectáreas cultivadas conlos organismos genéticamente modificados sin estar siquiera legalmente establecido el funcionamiento de la CONABIA. O sea que no lo tenemos en la ley. La importancia de este proyecto es que incorpora esta cuestión.
Todavía nos falta hacer la consulta con la Comisión de Salud y con los organismos no gubernamentales que están interesados en el tratamiento de este proyecto de ley. Este proyecto caduca el último día de febrero, pero como nuestra labor legislativa termina el 30 de noviembre, sería conveniente que se volviera a presentar con todos los aportes que se han hechoaquí y los que van a surgir de las ONG. Yo pertenezco al grupo de legisladores que se van el 9 de diciembre.
Seguiremos trabajando y colaborando para hacer la mejor ley para que el país pueda garantizar a los usuarios y a los consumidores que lo que están consumiendo es realmente saludable y que mejora la calidad de vida de los ciudadanos de aquí a futuro. No estamos legislando para el ahora sinoque estamos generando una ley para las generaciones futuras. Los resultados de esta ley se verán dentro de veinte, treinta y cuarenta años. No está ahora la posibilidad científica de comprobar si esto es totalmente nocivo, saludable o apropiado.
De todos modos la importancia de la ley vale la pena; esperemos hacer la mejor ley para estos tiempos. Quiero agradecer los aportes que se han formulado en esta reunión.
Sr. PRESIDENTE (Peyrou).- Tiene la palabra la señora diputada Foco.
Sra. FOCO.- Seré breve, porque como recién bien señaló el señor presidente de la Comisión de Ciencia y Tecnología, este debate no termina acá.
Quiero sí reivindicar la preocupación que oportunamente tuvo y tuvimos un grupo de diputados de la Comisión de Recursos Naturales y Conservación del Ambiente Humano, que remitió en aquella oportunidad una nota al presidente de la Cámara para que se gire este proyecto a esta comisión para su tratamiento y que permitió esta apertura graciasa la cual hemos tenido la oportunidad de escuchar la participación de importantísimas autoridades de entes gubernamentales que han aportado elementos sumamente significativos, de una profundidad técnica y científica que creo nos faltaba en algunos aspectos.
Seguramente las sugerencias formuladas serán objeto posterior de debate y serán tenidas en cuenta. Me pareció sumamente importante lo señalado por los representantes de la Secretaría para la Tecnología y de la Secretaría de Desarrollo Sustentable y Política Ambiental. Teniendo en cuenta lo que señalaba la representante de Relaciones Exteriores de Cancillería, creo que nuestra responsabilidad no es que estemos en contra de esta ley- es absoluta. Por eso tenemos que dar el mayor debate posible; habrá que invitar también a otras organizaciones.
Debemos dar la seguridad no sólo a los productores sino a la población toda de que cuando esta ley salga se contemplen todos los aspectos que nos han preocupado.
Quiero agradecer la presencia de todos y decirles que cualquier duda que tengamos los llamaremos para poder evacuarla.
Sr. PRESIDENTE (Peyrou).- Tiene la palabra el señor diputado Castellani.
Sr. CASTELLANI.- En la misma dirección de lo que se ha venido diciendo, quiero también agradecer a los funcionarios que han realizado sus exposiciones. Me siento sumamente satisfecho por el debate que se está dando de una actividad y de una ley tan importante. Estoy contento porque -soy secretario de la comisión especial de biotecnología- junto con el señor diputado Briozzo tuvimos la oportunidad de debatir estos temas con muchos organismos que fueron citados; lo que estamos debatiendo es una realidad de la República Argentina.
Cada uno tiene su forma de pensar, con distintos matices, todoes importante y enriquece.
Deseo expresar que me siento muy consustanciado con lo planteado por el doctor Regúnaga y por la señora embajadora Bondanza y realmente creo que esa es la dirección que sedebe tomar en un país, aquí se ha hablado mucho de la agricultura y de la soja, que centra su cuestión económica en la agricultura.
En la Argentina el campo ha sido el mayor generador de divisas,lo sigue siendo, pero nos debe alegrar la cifra de 5 mil millones de dólares en la exportación de soja, somos primeros exportadores de harina y aceite. Creo que debemos marcar una política de Estado, que coincido debemos llevar a cabo, teniendo en cuenta todas las cuestiones. ¿Quién quiere fabricar algo que no sea beneficioso y saludable? Evidentemente ese es el centro principal de la generación de nuestra economía. Así como la Unión Europea tiene otra política ésta es la que nosotros, si Dios quiere, debemos llevara delante.
Creo que la combinación que se dio, como dijo el Secretario de Agricultura, entre la conservación de los suelos –una de las cosas importantes que se deja de lado- y los transgénicos ha producido una esperanza en esta desvalida economía Argentina. El país, en relación con la cantidad de hectáreas trabajadas, ha incorporado la siembra directa, que es conservacionista de los suelos, y ha combinado los transgénicos. Así fue la irrupción de la soja cuando los precios del maízy del trigo se despreciaban y ponían a la gente de campo en una situación todavía más difícil; la aparición de la soja fue una esperanza. La Argentina también está adelante en lo que respecta a transgénicos y elementos genéticamente modificados y tenemos que hacerlos prevalecer.
Luego de estas reflexiones quiero hacer un par de comentarios. Considero que es verdad que muchas veces las empresas privadas han desarrollado lo que el Estado no pudo hacer.
Creo que si Argentina ha avanzado mucho en esto, como decía el secretario, no sería conveniente tratar de crear una tasa de inspección y verificación, un fondo de bioseguridad agropecuaria. A veces los problemas que tiene la producción argentina van de la mano de ver qué impuesto le podemos crear.
Yo no provengo del ámbito académico, sino más bien justamente de la citada provincia de Santa Fe, de los pequeños y medianos productores agrícolas. Difiero con las expresiones del diputado Volando, en el sentido de que los productores de 120 ó 180 hectáreas se ven perjudicados con este proyecto. Ellos agradecen la aparición de esta técnica, que ha traído la esperanza de producir en la República Argentina.
Los problemas de los pequeños y medianos productores se deben a otras cuestiones como los subsidios a los precios internacionales. Antes vivían muchas familias de una extensión menor y hoy siguen con la misma mecánica.
He visto también que muchas veces pequeños y medianos productores cuando están bien administrados se manejan mejor que los grandes que van a la ruina cuando no conservan las premisas básicas de cualquier negocio. Creo que se hicieron observaciones importantes. El debate es muy bueno y estoy contento de participar.
Sr. PRESIDENTE (Peyrou).- Tiene la palabra el señor diputado Giles.
Sr. GILES.- Quiero hacer dos comentarios concretos.
Quiero retomar lo que indicó la diputada Espínola en el sentido de que sean invitados los profesionales, técnicosy autoridades del Ministerio de Salud para escucharlos, para que el tema se debata en la Comisión de Salud y luego escucharla opinión formal de sus integrantes.
En segundo lugar, me parece más que evidente, luego de haber escuchado las respetables opiniones que se han volcado en estas horas, y sobre todo basándome en las opiniones de la Secretaría de Recursos Naturales y de la Comisión de Ciencia y Técnica, por sobre la cuestión económica hay temas de índole más amplia y que atañena la salud, recursos naturales y medicamentos.
Sugiero, a quien tuvo la gentileza de invitarnos y realizar esta reunión, que en lo sucesivo se tenga en cuenta otro proyecto de ley que fue presentado en la Cámara, tratadoy aprobado en la Comisión de Recursos Naturales, que contempla alguna de las cuestiones mencionadas de este proyecto tan particular que atañe a los agropecuarios pero que es mucho más amplio y que se engarza con algunas opiniones de recursos naturales y ciencia y técnica, me refiero al proyecto del señor diputado Salvatori.
Aunque no sea formal lo que estoy pidiendo, porque no fue el proyecto que mencioné el que motivó esta reunión, creo que debe ser incluido por las opiniones dadas.
Sr. PRESIDENTE (Peyrou).- Entiendo que parte de lo solicitado se ha cumplido. Los diputados de la Comisión de Salud fueroninvitados. El Ministerio de Salud no fue convocado. El proyecto de Salvatori está en tratamiento en la Comisión de Ciencia y Técnica. Tiene la palabra el señor Regúnaga.
Sr. REGUNAGA.- Antes de que existiera la reunión de Río de Janeiro y de que se firmara el tratado de Cartagena, me tocó crear la CONABIA en la que participan distintas áreas del gobierno.
Quiera destacar que nunca en la existencia y producción de nuestros organismos genéticamente modificados hemos recibido cuestionamientos de terceros países respecto ala calidad de las actividades que realiza la CONABIA.
La existencia de ese organismo y la preocupación dela Secretaría de Agricultura de analizar con mucho detenimiento los impactos sobre el medio ambiente y la salud humana, son reconocidos internacionalmente. No me gustaría que quedara la imagen de que los que se ha hecho hasta ahora tiene cuestionamientos internacionales.
Es más: nosotros como argentinos debemos tener el orgullo de que nos adelantamos a la existencia de estos tratados, de que estamos haciendo un seguimiento del impacto ambiental y sobre la salud y de la evaluación del impacto sobre los mercados mucho antes y más formalmente de lo que realizan otros países en el mundo.
Quiero rescatar esto porque pensando en el futuro de la agricultura y teniendo en cuenta que ella es productora de alimentos y tiene impacto sobre el medio ambiente, la Secretaría de Agricultura es a la primera que le interesa que nosotros podamos garantizar al mundo que estamos produciendo alimentos que son inocuos, demejor calidad y, al mismo tiempo, que no tienen impacto sobre el medio ambiente, porque es nuestro recurso básico parala producción sustentable.
Sr. PRESIDENTE (Peyrou).- Para cerrar esta reunión quisiera mencionar dos o tres cuestiones.
En primer lugar, recuerdo a los legisladores presentes que la semana próxima tenemos previstas nuevas reuniones sobre este mismo tema con enfoques distintos. En segundo término, reitero la solicitud a los representantes del Poder Ejecutivo para que nos envíen por escrito sus opiniones e incluso algunos documentos que fueron citados aquí.
Por último, agradezco no ya la presencia porque cada persona que hablaba agradecía la presencia de ustedes-, sino que en realidad quiero hacer algo más: quiero agradecer el nivel de las exposiciones. Esto no es algo trivial, ya queel nivel de las exposiciones es lo que permite dos cosas que sonfundamentales: que haya un nivel de consenso básico para que pueda entenderse de qué forma se pueden desatar los nudos que existen alrededor de este tema y, además, -éste también es un tema central que fue citado por otros legisladores- que alrededor de esta cuestión haya una política de Estado. Este es el objetivo de la inmensa mayoría de quienes estamos aquí, y este nivel nos va a ayudar a quelo consigamos.
No habiendo más asuntos que tratar, queda levantada la reunión.
– Es la hora 12 y 53.
This Post Has 0 Comments